La interrupción del tratamiento con el fármaco no pareció revertir dicho problema
Francesc Martínez
Durante los últimos años, diversos ensayos han mostrado resultados controvertidos en cuanto a la asociación entre el empleo de Tenofovir (Viread®; también en Truvada® y Atripla®) y el desarrollo de alteraciones renales.
Así, mientras que en los amplios estudios clínicos de distribución aleatoria que llevaron a la aprobación del fármaco no se observó la toxicidad renal de tenofovir, en otros realizados posteriormente -que permitieron evaluar su acción a largo plazo- sí que se apreció dicho tipo de toxicidad.
Dada la aparente contradicción entre los resultados entre los diversos ensayos efectuados, un equipo estadounidense de investigadores decidió realizar un amplio estudio retrospectivo a partir de los datos obtenidos de una amplia cohorte formada por 10.841 personas con VIH atendidas en centros médicos para veteranos del ejército de los EE UU que iniciaron el tratamiento antirretroviral entre 1997 y 2007.
Los resultados fueron publicados en la edición electrónica del 4 de febrero de la revista AIDS:
http://journals.lww.com/aidsonline/Abstract/publishahead/Association_of_tenofovir_exposure_with_kidney.98985.aspx
La mayoría de los participantes [el 98%] eran hombres, la mediana de edad era de 46 años y un 40% eran de etnia blanca.
Parámetros como los niveles de CD4, la carga viral, la presencia de algunas comorbilidades (hipertensión, diabetes o hepatitis C) u otros factores de riesgo de daño renal (tabaquismo o niveles de lípidos anómalos) tuvieron una incidencia similar tanto en el grupo de participantes con tenofovir como en el formado por personas que no tomaban dicho fármaco.
Por medio de métodos de análisis estadístico, los investigadores evaluaron la asociación entre el uso de tenofovir y el desarrollo de proteinuria (presencia de proteínas en la orina con valores de 30 mg/dL o superiores en dos mediciones de seguimiento consecutivas), la disminución rápida de la función renal [de un mínimo de 3 mL/min/1,73m2 en la tasa de filtración glomerular (TFG) en un año] y el desarrollo enfermedad renal crónica (definida como una TFG inferior a 60 mL/min/1,73m2).
Los tres acontecimientos evaluados son considerados marcadores claros de toxicidad en los riñones.
La mediana de seguimiento osciló entre los 3,9 años (en el caso de las evaluaciones de proteinuria) y los 5,5 años (en la evaluación del desarrollo de enfermedad renal).
En la cohorte analizada se dieron un total de 3.400 casos de proteinuria, 3.078 de disminución rápida de la función renal y 533 de enfermedad renal crónica.
En el análisis no se observó que otros factores de riesgo de problemas renales preexistentes empeoraran los incrementos de riesgo asociados a tenofovir.
Del mismo modo, el uso de otros antirretrovirales no modificó de forma consistente los riesgo apreciados.
Los resultados observados en el presente estudio darían más importancia al desarrollo de GS-7340, un profármaco de Tenofovir que presentaría una mayor tolerabilidad, minimizando el impacto del fármaco a nivel renal (véase La Noticia del Día 07/02/2012):
http://gtt-vih.org/actualizate/la_noticia_del_dia/07-02-12
Fuente: HIVandHepatitis
Referencia: Scherzer R, Estrella M, Li Y, Deeks S, Grunfeld C, and Shlipak MG. Association of tenofovir exposure with kidney disease risk in HIV infection. AIDS. February 4, 2012.
Nota Completa:
http://gtt-vih.org/actualizate/la_noticia_del_dia/21-02-12
Website:
http://gtt-vih.org/
Francesc Martínez
Durante los últimos años, diversos ensayos han mostrado resultados controvertidos en cuanto a la asociación entre el empleo de Tenofovir (Viread®; también en Truvada® y Atripla®) y el desarrollo de alteraciones renales.
Así, mientras que en los amplios estudios clínicos de distribución aleatoria que llevaron a la aprobación del fármaco no se observó la toxicidad renal de tenofovir, en otros realizados posteriormente -que permitieron evaluar su acción a largo plazo- sí que se apreció dicho tipo de toxicidad.
Dada la aparente contradicción entre los resultados entre los diversos ensayos efectuados, un equipo estadounidense de investigadores decidió realizar un amplio estudio retrospectivo a partir de los datos obtenidos de una amplia cohorte formada por 10.841 personas con VIH atendidas en centros médicos para veteranos del ejército de los EE UU que iniciaron el tratamiento antirretroviral entre 1997 y 2007.
Los resultados fueron publicados en la edición electrónica del 4 de febrero de la revista AIDS:
http://journals.lww.com/aidsonline/Abstract/publishahead/Association_of_tenofovir_exposure_with_kidney.98985.aspx
La mayoría de los participantes [el 98%] eran hombres, la mediana de edad era de 46 años y un 40% eran de etnia blanca.
Parámetros como los niveles de CD4, la carga viral, la presencia de algunas comorbilidades (hipertensión, diabetes o hepatitis C) u otros factores de riesgo de daño renal (tabaquismo o niveles de lípidos anómalos) tuvieron una incidencia similar tanto en el grupo de participantes con tenofovir como en el formado por personas que no tomaban dicho fármaco.
Por medio de métodos de análisis estadístico, los investigadores evaluaron la asociación entre el uso de tenofovir y el desarrollo de proteinuria (presencia de proteínas en la orina con valores de 30 mg/dL o superiores en dos mediciones de seguimiento consecutivas), la disminución rápida de la función renal [de un mínimo de 3 mL/min/1,73m2 en la tasa de filtración glomerular (TFG) en un año] y el desarrollo enfermedad renal crónica (definida como una TFG inferior a 60 mL/min/1,73m2).
Los tres acontecimientos evaluados son considerados marcadores claros de toxicidad en los riñones.
La mediana de seguimiento osciló entre los 3,9 años (en el caso de las evaluaciones de proteinuria) y los 5,5 años (en la evaluación del desarrollo de enfermedad renal).
En la cohorte analizada se dieron un total de 3.400 casos de proteinuria, 3.078 de disminución rápida de la función renal y 533 de enfermedad renal crónica.
En el análisis no se observó que otros factores de riesgo de problemas renales preexistentes empeoraran los incrementos de riesgo asociados a tenofovir.
Del mismo modo, el uso de otros antirretrovirales no modificó de forma consistente los riesgo apreciados.
Los resultados observados en el presente estudio darían más importancia al desarrollo de GS-7340, un profármaco de Tenofovir que presentaría una mayor tolerabilidad, minimizando el impacto del fármaco a nivel renal (véase La Noticia del Día 07/02/2012):
http://gtt-vih.org/actualizate/la_noticia_del_dia/07-02-12
Fuente: HIVandHepatitis
Referencia: Scherzer R, Estrella M, Li Y, Deeks S, Grunfeld C, and Shlipak MG. Association of tenofovir exposure with kidney disease risk in HIV infection. AIDS. February 4, 2012.
Nota Completa:
http://gtt-vih.org/actualizate/la_noticia_del_dia/21-02-12
Website:
http://gtt-vih.org/