Páginas con Documentos Descargables / Pincha para los Enales

viernes, 2 de agosto de 2013

IAS 2013: Potencial de la Vacunación Frente al Virus del Papiloma Humano en Hombres Gays Adultos

La elevada frecuencia de reinfecciones por nuevos subtipos del virus podría justificar el uso de esta estrategia, a pesar de observarse numerosos casos de regresión espontánea de las lesiones precancerosas.
 
En el marco de la VII Conferencia de la Sociedad Internacional del Sida sobre Patogénesis, Tratamiento y Prevención del VIH (IAS 2013), celebrada en Kuala Lumpur (Malasia), un equipo de investigadores australianos evaluó el potencial papel de la prevención de la infección por cepas del virus del papiloma humano (VPH) de alto riesgo en hombres adultos homosexuales a través del uso de dos vacunas: la tetravalente (Gardasil®), que protege frente a los subtipos 6, 11, 16 y 18; y la nonavalente, en investigación, que proporciona protección frente a los subtipos 6, 11, 16, 18, 31, 33, 45, 52 y 58.
 
Los investigadores determinaron infecciones y reinfecciones (evaluando los subtipos) de los participantes durante tres años.
 
Según los resultados del estudio, las vacunas podrían prevenir la infección por cepas de alto riesgo de desarrollo de lesiones anales precancerosas.
 
Un análisis posterior concluyó que dichas lesiones serían frecuentes entre hombres que practican sexo con hombres (HSH) y parecen resolverse de forma espontánea en numerosas ocasiones, pero con menor frecuencia cuando se trata de subtipos del VPH de alto riesgo.
 
La investigación forma parte del Estudio para la Prevención del Cáncer Anal (SPANC, en sus siglas en inglés), efectuado en Sydney (Australia), y tuvo su origen en la creciente preocupación acerca de la elevada incidencia de cáncer anal entre hombres gais -especialmente entre aquellos con VIH, donde la tasa de dicho cáncer llega al uno por 1.000 (muy elevada)-.
 
En Australia, la vacuna tetravalente está recomendada para chicas en edad escolar desde el año 2007, y para chicos, desde el presente año.
 
De hecho, está aprobada para mujeres de hasta 45 años, pero en hombres solo está indicada hasta los 26 años, dada la notoria ausencia de datos clínicos que respalden su utilidad a partir de esa edad.
 
Para cubrir el vacío de datos existente, los investigadores pretendieron evaluar la potencial utilidad de la vacuna tetravalente y de la nonavalente en varones homosexuales de edades superiores a las contempladas en la indicación de la vacuna tetravalente.
 
Un total de 342 hombres gais con edades a partir de los 35 años participaron en el ensayo. Los participantes fueron seguidos entre los años 2010 y 2013, siendo cribados de forma periódica sus subtipos de VPH.
 
La mediana de la edad de los participantes era de 49 años (tenían entre 35 y 79 años) y el 29% vivían con VIH.
El 89% de los que vivían con VIH tomaban terapia antirretroviral y, de estos, el 84% presentaban carga viral indetectable y el 83%, un recuento de CD4 superior a 350 células/mm3.
 
Al inicio del seguimiento, el 51% de los participantes estaban infectados por un subtipo del VPH cuya protección se ofrece mediante la vacuna tetravalente y dos tercios por uno cubierto por la vacuna nonavalente.
 
El subtipo más prevalente era el 16, presente en el 30% de los participantes.
 
A lo largo de los tres años de seguimiento, se observó una elevada incidencia de infecciones por subtipos del papilomavirus de alto riesgo (asociados a cáncer).
 
Cada año, una quinta parte de los participantes adquirieron la infección por una cepa cuya protección es proporcionada por la vacuna tetravalente y el 27% por una cubierta por la nonavalente.
 
En las nuevas infecciones, el subtipo con mayor incidencia fue el 6 (nueve casos por cada 100 persona-años), seguido por el 45 (ocho casos por cada 100 persona-años) y el 16 (cinco casos por cada 100 persona-años).
 
La infección por VIH constituyó un factor de riesgo significativo de padecer infección por subtipos del VPH de alto riesgo al inicio del estudio y de reinfectarse durante el periodo de seguimiento.
 
Como conclusión a estos resultados, los investigadores manifestaron que, debido a la elevada incidencia y prevalencia de cepas del VPH de alto riesgo de progresión observadas en hombres gais adultos -sobre todo entre aquellos que viven con VIH-, parece cobrar sentido la estrategia de utilizar vacunas frente al VPH en hombres gais de cualquier edad, algo ya apuntado por un reciente estudio (véase La Noticia del Día 09/01/2013).
 
En un segundo estudio, el mismo equipo de investigadores presentó resultados relativos a la presencia y evolución de las lesiones intraepiteliales escamosas de alto grado (HSIL, en sus siglas en inglés), de tipo precanceroso, entre los participantes del SPANC.
 
Al comienzo del estudio, la prevalencia de HSIL era del 37%. El porcentaje fue mayor entre hombres con VIH (45%) que entre aquellos sin el virus (34%), aunque la diferencia no fue significativa.
 
Entre los 149 hombres sin HSIL al inicio, el 22% desarrollaron dicho tipo de lesiones a lo largo de un promedio de un año de seguimiento.
 
La tasa de incidencia fue superior en hombres con VIH, pero la diferencia respecto a aquellos participantes sin el virus de la inmunodeficiencia humana, de nuevo, no alcanzó valores significativos.
 
Los hombres infectados por cepas del VPH de alto riesgo al empezar el estudio (en particular los subtipos 16 y 18) presentaron un riesgo significativamente superior al de aquellos sin dichos subtipos de desarrollar HSIL.
 
En el 26% de los varones con HSIL al comienzo del estudio se produjo regresión espontánea a displasia de bajo grado y en el 18%, regresión espontánea total.
 
La regresión fue más común en aquellos hombres con solo un cuadrante del área anal afectado.
 
Las tasas de regresión fueron similares en hombres con VIH a las apreciadas en hombres sin dicho virus.
 
Las tasas de regresión fueron menores en varones con subtipos del VPH 16 y/o 18 que en aquellos con otros subtipos.
 
Este segundo estudio muestra unas interesantes tasas de regresión espontánea de las HSIL sin tratamiento, aunque el hecho de que en subtipos de alto riesgo como el 16 o el 18 (incluidos en la vacuna tetravalente disponible en la actualidad y en la nonavalente en investigación) dichos episodios ocurran con menor frecuencia seguiría justificando la estrategia de la vacunación en hombres gais adultos.
 
Referencias:  
Poynten IM, Tabrizi S, Jin F, et al. Potential impact of human papillomavirus (HPV) vaccination among homosexual men: a review of vaccine-preventable anal HPV types in the SPANC study.7th International AIDS Society Conference on HIV Pathogenesis, Treatment and Prevention. Kuala Lumpur, June 30-July 3, 2013. Abstract WEPE536 ◄
 
Jin F, Poynten IM, Machalek D, et al. High prevalence, incidence and clearance of anal high-grade squamous intraepithelial lesion (HSIL): early evidence from a natural history study in homosexual men. 7th International AIDS Society Conference on HIV Pathogenesis, Treatment and Prevention. Kuala Lumpur, June 30-July 3, 2013. Abstract + Poster WEPDB0104 ◄
 
 
Website Grupo de Trabajo sobre Tratamientos del VIH (gTt):
 
Website 7th International AIDS Society Conference on HIV Pathogenesis, Treatment and Prevention (IAS 2013):