Páginas con Documentos Descargables / Pincha para los Enales

jueves, 12 de noviembre de 2020

El Cambio a Inhibidores de la Integrasa no está Ligado a Aumentar la "Grasa Mala"

Un estudio analizó la composición grasa de las personas que cambiaron sus antirretrovirales para incluir un inhibidor de la integrasa. 

Las personas con VIH que aumentan de peso después de cambiar su régimen antirretroviral (ARV) para incluir un inhibidor de la integrasa no aumentan una cantidad desproporcionada de grasa asociada con un mayor riesgo de enfermedad metabólica, como diabetes o enfermedad cardiovascular, informa Aidsmap. 

Giovanni Guaraldi, MD, de la Universidad de Módena en Italia, informó los hallazgos de un estudio que comparó la composición de la grasa en función de si las personas que tomaban ARV cambiaron a un inhibidor de la integrasa en la conferencia virtual de Glasgow sobre terapia con medicamentos contra el VIH a principios de este mes. 

El estudio incluyó a 211 personas que cambiaron a un inhibidor de la integrasa y 207 personas que continuaron con sus mismos ARV. Recibían atención para el VIH en la Clínica Metabólica del VIH de Módena entre 2007 y 2019. 

Los autores del estudio evaluaron la composición corporal de los participantes en su primera y última visita del estudio con una DXA y una tomografía computarizada. 

Los participantes tenían una edad media de 50 años y tenían un índice de masa corporal promedio de 23,5 (18,5 a 24,9 es el rango de peso corporal normal). 

Aproximadamente 7 de cada 10 eran hombres. 

Durante una mediana de seguimiento de 4,5 años para los que cambiaron de ARV y cuatro años para los que no cambiaron, una proporción similar de cada grupo (un 24% y un 28% respectivamente) vio aumentar su peso corporal en al menos un 5%. 

Aquellos que cambiaron a un inhibidor de la integrasa tendieron a ganar más grasa subcutánea (grasa debajo de la piel) y experimentaron una reducción significativa en la densidad de la grasa visceral (grasa que rodea los órganos internos o el corazón).

La grasa subcutánea se considera más saludable que la grasa visceral, que está asociada con enfermedades metabólicas y cardiovasculares. 




Website Aidsmap: 
https://www.aidsmap.com/  

Website PubMed:
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/