Gran parte de los casos están relacionados entre sí, y se plantea como posible explicación los cambios de hábitos en el consumo.
Se ha registrado un importante repunte en los casos de infección por VIH entre los usuarios de drogas inyectables [UDI] en Tel Aviv (capital de Israel), atribuido a que estas personas han empezado a tomar una nueva sustancia inyectable más barata y que implica un notable cambio en los hábitos de inyección respecto al consumo de heroína.
Un equipo de investigadores israelitas advirtió en la XIV Conferencia Europea del Sida, celebrada la semana pasada en Bruselas (Bélgica), que este hecho debería ser una señal de alarma para otras ciudades que tienen una epidemia de VIH aparentemente estable entre esta población de UDI.
El enviado especial del Secretario General de las Naciones Unidas sobre VIH en Europa del Este y Asia Central, el profesor Michel Kazatchkine, también indicó en la conferencia la posibilidad de que emerjan nuevas epidemias de VIH en personas usuarias de drogas, tras los recientes repuntes de casos en esta población observados en Rumanía y Grecia debido a la disponibilidad de nuevas sustancias.
El hecho de que la población de usuarios de drogas intravenosas sea una de las más estigmatizadas, la pone en una situación de especial vulnerabilidad frente a la infección por VIH.
Sin embargo, muchos países de Europa del Este mantienen unas políticas represivas muy contraproducentes respecto a esta población, lo que se traduce en que la epidemia de VIH en esos países es mucho más difícil de controlar (véase La Noticia del Día 13/06/13).
Un ejemplo de las ventajas que ofrecen las políticas de reducción de daños basados en resultados científicos lo tenemos en Grecia, donde un recorte en los programas de intercambio de jeringuillas ha supuesto un enorme aumento en el número de casos de VIH en este colectivo, y que probablemente acabe por trasladarse al conjunto de la población del país si no se ataja antes el problema (véase el artículo 'Peligran las políticas de reducción de daños en Grecia y Portugal', del número 51 de LO+POSITIVO).
La prevalencia del VIH entre las personas usuarias de drogas inyectables en Israel había permanecido estable durante aproximadamente los últimos diez años como resultado de los programas financiados por el estado de intercambio de agujas y jeringuillas y de provisión de terapia de sustitución de opiáceos.
No obstante, a mediados de 2012 empezó a detectarse un fenómeno preocupante: en el transcurso de dos meses, se diagnosticaron cinco infecciones por VIH en personas usuarias de drogas inyectables, y a lo largo del año siguiente se identificaron otros 40 casos similares.
Las cargas virales en el momento del diagnóstico fueron elevadas (mediana de 181.000 copias/mL). El análisis filogenético del virus de 30 de estas personas reveló que las infecciones estaban vinculadas entre sí.
En la mayoría de los casos, el diagnóstico se produjo después de que la persona ingresara en el centro hospitalario con una infección bacteriana grave.
Además, todas estas personas tenían hepatitis C y habían sido usuarias de heroína inyectada durante mucho tiempo, y habían estado utilizando de forma regular los programas de intercambio de jeringuillas y agujas.
Otro punto que todas estas personas tenían en común era que habían empezado a tomar una droga inyectable más barata, conocida como 'hagitat' en Israel.
Se trata de un derivado de la catinona ('sales de baño' en argot) inyectado en combinación con buprenorfina (un fármaco usado en la terapia de sustitución de opiáceos).
Esta sustancia se asocia con sensaciones de euforia, incremento del deseo sexual y de la sociabilidad, aunque también con determinados comportamientos erráticos y violentos.
Se sabe asimismo que puede provocar arritmias cardiacas, hipertermia, rabdomiólisis e incluso la muerte, y su empleo está relacionado con una mayor frecuencia de infecciones bacterianas graves cuando se inyecta.
Por su parte, no se detectó ningún caso de infección por VIH entre los usuarios de drogas habituales que siguieron utilizando heroína.
El consumo de este producto derivado de la catinona tiene una serie de características que hacen que, en la práctica, el riesgo de infección por VIH sea superior al que se tiene cuando se consume heroína.
En primer lugar, 'hagitat' ha alcanzado popularidad con rapidez entre los usuarios de drogas en Tel Aviv porque resulta más económico que la heroína, pero su efecto es efímero, lo que hace que sea preciso realizar muchas más inyecciones (hasta 30 al día).
Además, mientras que el consumo de heroína suele ser una actividad relativamente privada, la inyección de catinona suele tener un gran carácter social.
Esto se traduce en que aumenta la posibilidad de compartir el material de inyección con muchas más personas. Por último, mientras que 'hagitat' se disuelve en agua fría, la inyección de heroína implica un paso de calentamiento en una cuchara o un recipiente, lo que puede tener un cierto efecto esterilizarte (por limitado que sea).
Entre las medidas implementadas para evitar la propagación del VIH, se ha realizado la intensificación de los programas de intercambio de agujas y jeringuillas, incluyendo la formación del personal que los lleva a cabo, y se ha puesto en marcha una iniciativa de cribado entre los usuarios de drogas inyectables que acuden a dichos servicios.
A todas las personas que den positivo al VIH se les ofrece tratamiento de forma inmediata con el fin de reducir la carga viral y limitar la propagación del virus.
En su exposición, uno de los responsables del estudio afirmó que esta experiencia demuestra que es necesario contar con una respuesta rápida y multidisciplinar cuando un cambio en los hábitos de consumo de drogas desencadena un brote de VIH, como ha ocurrido en Israel.
Fuente: Aidsmap
Referencia: Katchman E, et al. An outbreak of primary HIV infection among injecting drug users in Tel Aviv, Israel, associated with changes in illicit drug use practices. 14th European AIDS Conference, Brussels, Abstract PS11/4, 2013.
Website Aidsmap:
Website 14th European AIDS Conference; Brussels, Belgium (EACS 2013):
http://www.eacs-conference2013.com/