Tanto en adolescentes como en adultos, comer más alimentos ultraprocesados se relacionó con un mayor riesgo de desarrollar enfermedad hepática esteatótica asociada a disfunción metabólica (MASLD), según los resultados del estudio presentados en la AASLD Liver Meeting.
MASLD, el nuevo nombre de la enfermedad del hígado graso no alcohólico (NAFLD), y su forma más grave, la esteatohepatitis asociada a disfunción metabólica (MASH, anteriormente conocida como esteatohepatitis no alcohólica o NASH), son responsables de una proporción cada vez mayor de casos avanzados.
Enfermedad hepática en todo el mundo. La acumulación de grasa en el hígado puede provocar inflamación, fibrosis, cirrosis e incluso cáncer de hígado.
Sin terapias médicas efectivas aprobadas, el manejo de la enfermedad depende de cambios en el estilo de vida, como la pérdida de peso y el ejercicio. MASLD a menudo se asocia con la obesidad y la diabetes tipo 2, pero no se comprende completamente cómo los alimentos ultraprocesados afectan el desarrollo de la enfermedad del hígado graso.
Longgang Zhao, PhD, investigador postdoctoral en el Brigham and Women's Hospital y la Facultad de Medicina de Harvard, y sus colegas llevaron a cabo un estudio que incluyó a 806 adolescentes y 2734 adultos de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición (2017-2018).
Los investigadores evaluaron el consumo de alimentos ultraprocesados con la ayuda de datos dietéticos recopilados durante dos días completos. MASLD se evaluó mediante imágenes de elastografía transitoria (FibroScan).
Los adolescentes comían una media de 812 gramos de alimentos ultraprocesados cada día, mientras que los adultos comían 823 gramos.
Alrededor del 12% de los adolescentes y el 36% de los adultos tenían MASLD.
Tanto para adolescentes como para adultos, un mayor consumo de alimentos ultraprocesados se relacionó con un mayor riesgo de MASLD.
Esta asociación dependía en gran medida de tener un índice de masa corporal más alto y una circunferencia de cintura más grande.
Los investigadores también encontraron un vínculo positivo entre un mayor consumo de alimentos ultraprocesados y niveles más altos de albúmina y proteína C reactiva (un biomarcador de inflamación) en adultos.
“Una mayor ingesta de alimentos ultraprocesados se asoció con mayores probabilidades de tener [MASLD] tanto en adolescentes como en adultos.
Estas asociaciones están mediadas en gran medida por la elevada grasa corporal”, concluyeron los investigadores.
“Se necesitan más estudios prospectivos para confirmar nuestros hallazgos. Si se confirma, reducir la ingesta de alimentos ultraprocesados podría ayudar a prevenir [MASLD] tanto en adolescentes como en adultos”.
Website AASLD Liver Meeting 2023:
https://aasld.confex.com/aasld/2023/meetingapp.cgi/