Se recomienda complementar esta estrategia con otras medidas preventivas durante ese período inicial.
Un amplio estudio prospectivo publicado en Journal of Acquired Immune Deficiency Syndromes ha concluido que el riesgo de transmisión sexual del VIH descendería de forma pronunciada tras el inicio del tratamiento antirretroviral, pero que durante los primeros seis meses dicho riesgo aún sería significativo.
A los seis meses de iniciar el tratamiento, no obstante, dicho riesgo se reduciría a la mínima expresión y, de hecho, en el estudio no se detectaron casos de transmisión del VIH a partir de ese momento.
El presente estudio se realizó en un subgrupo de participantes del ensayo Partners PrEP, que llevó a la aprobación de la profilaxis preexposición (PrEP, en sus siglas en inglés) en EE UU, que había incluido a 4.747 parejas heterosexuales serodiscordantes de Kenia y Uganda.
El subgrupo seleccionado para el análisis estaba formado por 1.592 parejas –todas ellas pertenecientes al grupo de Partners PrEP en el que el miembro sin VIH no recibía PrEP– de las cuales se disponía de diversos datos tras el inicio del tratamiento antirretroviral del miembro de la pareja con VIH: tiempo hasta alcanzar carga viral indetectable, persistencia de material genético del virus en fluidos sexuales e incidencia de embarazos y/o transmisión del VIH al miembro de la pareja sin VIH.
El papel del tratamiento antirretroviral como prevención ha sido evidenciado en numerosos estudios, siendo los más destacados PARTNER y HPTN-052.
En ellos se concluyó que el riesgo de transmisión del VIH en parejas serodiscordantes cuando el miembro con VIH se encuentra en tratamiento antirretroviral con carga viral indetectable es extremadamente bajo, cercano a 0.
No obstante, dicho riesgo de transmisión no ha sido adecuadamente cuantificado cuando se inicia el tratamiento antirretroviral, es decir, en el período de tiempo en el cual se pasa de tener una carga viral detectable a la indetectabilidad viral.
Además, cabe tener en cuenta que entre alcanzar la supresión virológica en sangre y alcanzarla en los fluidos sexuales pueden transcurrir unas semanas, lo cual aún mantendría cierto riesgo de transmisión del VIH a pesar de haber alcanzado carga viral indetectable en sangre.
Los participantes acumularon un total de 474 persona-años de seguimiento hasta alcanzar la supresión virológica (definida en el estudio como tener una carga viral por debajo de 80 copias/mL.
La mediana del tiempo hasta alcanzar supresión virológica fue de un poco más de tres meses.
La probabilidad acumulada de alcanzar supresión virológica en sangre a los 3, 6, 9 y 12 meses de iniciar el tratamiento fue del 65%, el 85%, el 89% y el 91%, respectivamente.
A los seis meses de iniciar el tratamiento se detectó VIH en el 12% de las muestras de fluido cervical y en el 21% de las de semen (en este último caso un porcentaje claramente superior al de hombres con carga viral detectable en sangre en ese momento).
La mediana de la carga viral en dichas muestras era de 3,18log y de 2,6log en las muestras de fluido cervical y semen, respectivamente.
En el estudio se detectó que las parejas estaban manteniendo relaciones sexuales sin protección (tanto a través de cuestionarios, donde el sexo sin preservativo fue referido por el 10,5% de los participantes, como por medio de la incidencia de embarazos, de 8,8 casos por cada 100 persona-años de seguimiento).
La incidencia de la infección por el VIH entre las personas no infectadas al inicio del estudio fue de 2,08 casos por cada 100 persona-años de seguimiento en el período previo al inicio del tratamiento antirretroviral por parte del miembro de la pareja con VIH.
Dicha incidencia cayó hasta 1,78 casos por cada 100 persona-años de seguimiento durante los primeros seis meses en tratamiento (3 casos durante 168 persona-años de seguimiento) y hasta 0 tras los seis primeros meses en tratamiento.
De los tres casos acaecidos durante los primeros 6 meses, uno se produjo, probablemente, justo al inicio del tratamiento, ya que los anticuerpos se detectaron al cabo de un mes de iniciarlo.
Los dos restantes fueron diagnosticados a los 56 y a los 149 días de que el miembro con VIH de la pareja iniciara el tratamiento antirretroviral.
Solo se contó con datos de la carga viral del miembro de la pareja con VIH en un momento cercano a la transmisión en uno de los tres casos (concretamente en la transmisión producida a los 149 días) y esta era detectable (872 copias/mL a los 86 días de iniciar el tratamiento).
Los resultados del presente estudio ponen de manifiesto la importancia del tratamiento como prevención en parejas Serodiscordantes.
No obstante, a la luz de sus resultados, dicha estrategia presentaría una notable falta de efectividad durante los primeros meses tras el inicio del tratamiento, por lo que sería esencial complementarla con otras medidas preventivas durante ese período.
Fuente: Aidsmap
Referencia: Mujugira A et al. HIV transmission risk persists during the first 6 months of antiretroviral therapy. J Acquir Immune Defic Synr, online edition. DOI: 10.1097/QAI.000000000001019 (2016).
Website Aidsmap:
Website Journal of Acquired Immune Deficiency Syndromes (JAIDS):
http://journals.lww.com/jaids/pages/