La investigación indica que existen numerosas diferencias en el comportamiento del VIH en las mujeres en comparación con los hombres.
Por lo tanto, es posible que los investigadores tengan que tener en cuenta el sexo de los participantes al diseñar los estudios de cura, informa el mapa de ayuda.
Eileen Scully, MD, PhD, de la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, hizo una presentación sobre las diferencias de sexo en la dinámica del VIH dentro del cuerpo en la Conferencia 2020 sobre Retrovirus e Infecciones Oportunistas en Boston el mes pasado.
Señaló la existencia de diferencias basadas en el sexo en la dinámica del reservorio viral y varias facetas de cómo funciona el sistema inmunitario y cómo el estrógeno alienta a las células infectadas por el VIH que no replican a permanecer en su estado latente.
Aparentemente, estas diferencias están impulsadas por diferencias anatómicas, el microbioma del cuerpo, la genética y los detalles específicos relacionados con las células inmunes y cómo se expresan los genes, entre otros factores.
El VIH se replica más lentamente y, frente al tratamiento antirretroviral completamente supresivo (ARV), mantiene la replicación residual a niveles más bajos en las mujeres en comparación con los hombres.
Las mujeres también tienen niveles más bajos de ADN del VIH capaces de producir nuevas copias viables de virus codificados en sus células.
Además, cuando el tratamiento con ARV se interrumpe en los estudios de cura, las cargas virales de las mujeres tardan más en recuperarse que las de los hombres, en promedio.
Un análisis presentado en el Taller de curación comunitaria pre-conferencia de las poblaciones de estudio de 31 grupos de investigación de curación del VIH encontró que solo el 17% de los participantes eran mujeres.
En la conferencia principal, los resultados del primer estudio de cura para mujeres, llamado Moxie, mostraron que el modulador selectivo del receptor de estrógenos tamoxifeno no aumentó la actividad del vorinostat, un medicamento utilizado en los estudios de cura para tratar de conducir las células infectadas de forma latente a producir virus nuevamente como parte de una estrategia de cura llamada "patear y matar".
Sin embargo, el estudio reclutó rápidamente a 31 mujeres en los Estados Unidos para el estudio, lo que sugiere que el reclutamiento de mujeres para dicha investigación es factible.
Otro estudio de curación está en proceso en Sudáfrica, que incluirá solo a mujeres jóvenes.
Website Aidsmap:
http://www.aidsmap.com/
Website Conference on Retroviruses and Opportunistic Infections (CROI 2020):
http://www.croiconference.org/