¿Quiénes somos?

Tampico-Madero-Cd. Victoria, Tamaulipas, Mexico
Centro Nacional de Capacitación y Educación para la Prevención, Tratamiento y Cuidado del VIH/Sida

¡Bienvenidos!

México

Hora actual en
Mexico City, México

Espacio de Intercambio de Información, para Promover la Asistencia y Atención Médica en Instituciones de Salud y Asociaciones Civiles de Respuesta al Sida, con Marco de Lineamientos en Derechos Humanos.

Así como Promover, Difundir y Aplicar los Programas que las Instituciones Públicas y Privadas, Nacionales e Internacionales, y que Favorezca la Restitución, Atención y Tratamiento de las Personas con VIH/Sida.

Fortaleciendo así la Capacidad Médica Integral.

jueves, 30 de abril de 2020

Enfermedad del Hígado Graso Vinculada al Riesgo de Problemas Metabólicos en Personas con VIH

La enfermedad del hígado graso no alcohólico es más común entre las personas con el virus en comparación con la población general. 

Entre las personas con VIH, la enfermedad del hígado graso no alcohólico (NAFLD) se asocia con un mayor riesgo de problemas de salud metabólicos, informa Healio. 

La enfermedad del hígado graso es la enfermedad hepática más común en la población general mundial y se asocia con diabetes tipo 2, lípidos sanguíneos irregulares y presión arterial alta. 

La afección puede provocar inflamación, que con el tiempo puede provocar fibrosis, cirrosis y cáncer de hígado. 

En su forma más grave, la enfermedad del hígado graso se conoce como esteatohepatitis no alcohólica (NASH). 

Como se describe en The Journal of Infectious Diseases, un equipo de investigación dirigido por Thomas Krahn, MD, del Centro de Salud de la Universidad McGill en Montreal, evaluó la asociación entre la enfermedad del hígado graso y los nuevos diagnósticos de enfermedades metabólicas en 485 personas con VIH que no tenían virus de hepatitis B o C (VHB o VHC). 

Extrajeron su muestra de la cohorte LIVEr in HIV, o LIVEHIV. Los miembros del estudio fueron seguidos durante una mediana de 40 meses. 

Al comienzo del estudio, el 38% de los participantes tenía NAFLD, incluido el 17% que tenía NASH. Se sospechaba que el quince por ciento tenía fibrosis (cicatrización) sustancial del hígado, y se creía que el 2.5% tenía cirrosis, la etapa más avanzada de fibrosis. 

Las tasas de diagnóstico de diabetes y lípidos sanguíneos irregulares durante el seguimiento del estudio fueron respectivamente 4,7 veces y 8,2 veces más altas entre aquellos con NAFLD en comparación con aquellos sin la afección hepática.  

Después de ajustar los datos para tener en cuenta varias diferencias entre los miembros de la cohorte, los autores del estudio encontraron que tener NAFLD, en comparación con no tener la afección, se asoció con un riesgo 5.1 veces mayor de desarrollar diabetes y un riesgo 2.4 veces mayor de desarrollar lípidos sanguíneos irregulares. 

Las personas con VIH y NAFLD, concluyeron los autores del estudio, "tienen un mayor riesgo de [nuevos diagnósticos de] diabetes y [lípidos sanguíneos irregulares]. 

Las estrategias de derivación temprana y el manejo oportuno del riesgo metabólico pueden mejorar los resultados". 




Website Healio: 
https://www.healio.com/ 

Website The Journal of Infectious Diseases: 
https://academic.oup.com/jid