

Los altos índices de impunidad frente a estos crímenes son preocupantes y esta situación incrementa el riesgo de nuestra tarea.
A pesar de que la labor que desarrollamos es fundamental para la garantía y salvaguarda de democracias sustantivas en la región, en nuestros países afrontamos la aplicación de leyes antiterroristas y actividades de inteligencia; la represión y criminalización de la protesta social; obstáculos legales o administrativos para la libertad de asociación; limitaciones para el acceso a recursos y el silenciamiento de voces disidentes.
Muchos de estos actos son ejecutados por agentes públicos, permitidos por funcionarios judiciales y consentidos por la inacción del aparato estatal que en muchos casos no evita ni protege a defensoras y defensores de las agresiones que también sufren por parte de empresas y otros actores no estatales.
Articulo:
http://www.msmgf.org/index.cfm/id/11/aid/5913/lang_id/2
Nota Original:
http://www.awid.org/esl/Las-Noticias-y-Analisis/Temas-y-Analisis/Declaracion-del-Encuentro-de-defensoras-y-defensores-de-derechos-humanos-de-America-Latina